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¿La Rosca de Reyes, Que Representa?

¿La Rosca de Reyes, Que Representa?

¿La Rosca de Reyes, Que Representa?

(Foto/Getty Images)

LOS ANGELES (KWHY) — La Rosca de Reyes es una tradición familiar muy importante para la cultura hispana y muy popular en México, así como en diferentes países de América y España.

Cada 6 de enero las roscas adornan las mesas y se convierten en la protagonistas de las mesas, con su símbolo ovalado y un significado muy especial, El infinito circulo del amor divino.

Esta celebración reúne a familias y amigos y simboliza la Epifanía, haciendo alusión a las ofrendas al Niño Dios. Conmemorado por la iglesia católica como el Dia de los Santos Reyes.

A través de los siglos la festividad se arraiga como la primera celebración del año, marcando la llegada de los Reyes Magos, Gaspar, Melchor y Baltazar, cuyos presentes fueron ofrecidos al recién nacido bebe “Jesús”.

Cada año las roscas son hechas con mucho esmero, llenas de colores y diferentes frutas como los higos, cerezas y naranjas, a veces compota de guayabas y arándanos, estas roscas tienen un significado profundo, el infinito amor de Dios. Las frutas que la adornan simbolizan las joyas en las coronas de Reyes sabios. Dentro de cada rosca se encuentra un muñeco de plástico estratégicamente escondido, cuyo significado es el niño Jesús, el Salvador del Mundo, lo que añade algo mágico y misterioso a la experiencia de comer la deliciosa rosca.

Conforme a la tradición este dulce manjar se disfruta acompañada de una taza de chocolate o champurrado.

La tradición mexiquense posee un interesante elemento en la celebración, el afortunado que descubre al muñeco que representa al Jesús entre los pliegues de la rosca, tendrá la responsabilidad de cuidarlo, así que deberá comprar los tamales de la siguiente celebración el 2 de febrero, El Dia de La Candelaria.

Además, según las creencias que te salga el niño Jesús significa que es una bendición, se cree que todo el año serás bendecido por Dios, por eso debes guardarlo y celebrarlo como parte de la fe y el amor a Dios.

Este rito tiene raíces desde la Edad Media en siglo XIX por Europa, entre países como Francia y España, y fue adoptado en México en la época de la conquista.